Lamentablemente se acaba la época de ferias, y es necesario que mantengamos nuestras joyas en buen estado para la próxima temporada. Si te preguntas cómo lavar un vestido de flamenca, hoy te vamos a dar algunas claves para que quede limpio, pero sobre todo como nuevo.
Cómo lavar tu traje de flamenca
Si quieres disfrutar de alguna de las ferias que se celebran en otoño, aún tienes algo de tiempo para volver a lucir tu traje de flamenca.
Eso sí, lo más recomendable es que lo laves lo antes posible. Después de su última puesta, no demores demasiado el tiempo para lavarlo, cuanto antes lo hagas, más posibilidades tienes de que la temporada que viene puedas volver a “estrenarlo”.
No puedes olvidar leer la etiqueta del fabricante o diseñador. Puede ser que en ella aparezca alguna indicación especial a tener en cuenta.
Y, si lleva enaguas, el lavado mejor por separado.
¿Qué debes evitar al lavar tu traje de flamenca?
Nuestro consejo es que no lo lleves a la tintorería, no es recomendable su lavado en seco. Ni tampoco te des una paliza lavándole en la bañera, una costumbre muy habitual. Puedes hacerlo perfectamente en la lavadora.
Y nada de flecos en el lavado. Se enredarán y acabarán totalmente estropeados.
No debes usar ni suavizante, con él puedes hacer que el vuelo de los volantes desaparezca. Tampoco utilices lejías o cualquier otro producto que pueda dañar alguno de los tejidos.
Otra cuestión importante que debes evitar es usar la secadora. Jamás debes hacer uso de esta para secar tu traje de flamenca.
Qué pasos debes seguir para lavar tu traje de gitana
Para empezar debes introducirlo en la lavadora del revés, y debes elegir un programa corto y/o delicado y sin temperatura, es decir en agua fría.
Añade un vaso de vinagre y otro de sal, para ayudar a fijar los colores. También puedes añadir una bolsita absorbe color.
Haz un segundo lavado, igualmente delicado, corto y en agua fría. En este caso añade un poco de detergente líquido.
Para finalizar centrifuga tu traje de gitana, pero no con demasiadas revoluciones. Escoge una velocidad media – baja, que elimine el exceso de agua y no chorree demasiado cuando lo saques.
Después debes dejarlo secar, sin escurrir al aire libre si puede ser, tendido de una percha, y a la sombra. También puedes tenderlo en posición horizontal, si tiene demasiado peso por el agua, pero igualmente recuerda que, no debe darle el sol directamente.
Cuando vayas a plancharlo, hazlo del revés y a temperatura media. Los volantes deberás repasarlos uno por uno.
Y para terminar con nuestros consejos te recomendamos que una vez limpio, planchado y perfecto, dediques unos minutos a revisar si hay algún descosido o detalle que debas reparar. De esta manera lo guardarás impecable y listo para la próxima feria.
Esperamos que este nuevo post de Danza y Más, con los mejores consejos para saber cómo lavar un vestido de flamenca, te haya resultado útil o al menos interesante.